En Cuba, el año pasado, Estados Unidos reveló que 24 diplomáticos y miembros de sus respectivas familias fueron víctimas de un misterioso ataque no resuelto que los dejó con lesiones similares a un trauma cerebral. Diez diplomáticos canadienses y familiares suyos también sufrieron una extraña dolencia. “En este momento, no podemos conectar lo que ocurrió en La Habana, pero estamos investigando todas las posibilidades”, dijo, dijo a AFP, un funcionario de la embajada estadounidense en Beijing quien solicitó anonimato. ¡Qué casualidad! un ataque sónico en China contra diplomático norteamericano similar a los de Cuba.
El incidente motivo el año pasado a Estados Unidos a retirar más de la mitad de su personal de la embajada en La Habana, la que reabrió en 2015, cuando las dos naciones establecieron las relaciones diplomáticas que habían roto en 1961.
El Secretario de Estado, Mike Pompeo, le dijo este miércoles 23 de mayo a un panel Congresional que el “ataque sónico” reportado en China fue similar a los incidentes en Cuba donde los diplomáticos de los Estados Unidos luego resultados enfermos. “Las indicaciones médicas son muy similares y completamente consistentes con las indicaciones médicas que tomaron lugar a los americanos que trabajaban en Cuba”, dijo Pompeo durante el testimonio. Agregó que un equipo médico iba en ruta a la ciudad del sur de China a investigar el misterioso incidente.
La Embajada de Estados Unidos en Beijing, China emitió el miércoles (23 de mayo) una alerta de salud después de que un empleado gubernamental estadounidense experimentó un sonido “anormal” y sufrió una leve lesión cerebral –en un incidente que recuerda a una misteriosa dolencia que golpeó a diplomáticos en Cuba. Autoridades estadounidenses y chinas investigan el hecho después de que a un empleado, quien fue asignado a la sureña ciudad de Guangzhou, le fue diagnosticado lesión cerebral traumática leve (LCTL) dijo la vocera de la embajada, Jinnie Lee. En una alerta enviada por correo electrónico a ciudadanos estadounidenses en China, la embajada dijo que no sabe qué causó los síntomas ni conoce ninguna situación similar en el país.
La alerta indica que el empleado gubernamental “recientemente informó sobre sensaciones de sonido y presión, sutiles y vagas aunque anormales”. “El gobierno der Estados Unidos toma con seriedad estos informes y ha informado a su personal en China sobre este hecho”, indica el mensaje. “Si en China usted experimenta cualquier fenómeno auditivo o sensorial acompañado por sonidos inusuales o ruidos agudos, no intente ubicar la fuente. En cambio, trasládese a una ubicación donde los sonidos no estén presentes”, indica, al exhortar a las personas con problemas médicos a consultar a un doctor.
Lee dijo que el empleado experimentó “una variedad de síntomas físicos” entre el final de 2017 y durante abril de 2018. La persona fue enviada a Estados Unidos y diagnosticada, el 8 de mayo, con LCTL. “El Departamento (de Estados) está tomando con mucha seriedad el incidente, y está trabajando para determinar la causa y el impacto del incidente”, dijo Lee.
“El gobierno chino nos ha asegurado que también está investigando y tomando medidas adecuadas”. No fue posible contactar de inmediato a la cancillería china.
EL CASO CUBANO
En Cuba, las víctimas estadounidenses asociaron la aparición de sus síntomas con “sonidos inusuales o sensaciones auditivas”, dijo, en enero, al Senado de Estados Unidos, un médico del Departamento de Estado.
Charles Rosenfarb, doctor y director de la Oficina de Servicios Médicos del Departamento de Estado, dijo que los síntomas eran mixtos pero propios de trauma cerebral.
Las víctimas sufrieron dolor de cabeza, pérdida auditiva y pérdida parcial de capacidad cognitiva.
Inicialmente, las autoridades sospecharon que los estadounidenses habían sido blanco de algún tipo de arma acústica, aunque públicamente, altos funcionarios se mostraron más cautos, y hablaron de “ataques de salud”. Versiones periodísticas han sugerido que el FBI no ha logado la verificación de pruebas que respalden la teoría del arma sónica.
El gobierno de Estados Unidos ha responsabilizado a Cuba, planteando que el Estado autoritario de Raúl Castro seguramente llevó a cabo los ataques o al menos supo quién estuvo detrás de ellos.
El incidente motivo el año pasado a Estados Unidos a retirar más de la mitad de su personal de la embajada en La Habana, la que reabrió en 2015, cuando las dos naciones establecieron las relaciones diplomáticas que habían roto en 1961.
Canadá anunció el mes pasado que estaba trayendo de regreso a las familias de sus diplomáticos en Cuba después de que una investigación de un año sobre la dolencia no logró identificar una causa.
“La causa (de sus síntomas) permanece desconocida, aunque podría ser de origen humano”, fue la conclusión del gobierno canadiense.
Autoridades canadienses y estadounidenses sospecharon, inicialmente, de un “ataque sónico” o un “incidente psicosomático masivo”, pero esas causa son “ahora consideradas como poco probables”, dijo un alto funcionario canadiense.
Los síntomas incluyeron mareo, dolor de cabeza y falta de capacidad de concentración.
No obstante, a diferencia de sus contrapartes estadounidenses, ningún enviado canadiense dijo que oyó ningún sonido sospechoso antes de enfermar.
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