Cuando el hambre aprieta hay que buscar en la basura

Mercedes Alonso Contreras

Pinar del Río, Cuba.  Al transitar por las calles de la ciudad vuelta bajera y chocar con la realidad en que viven sus moradores nos preguntamos: ¿Es acaso  ésta la Cuba soñada por muchos próceres de la historia, la que tanta sangre costó para que todos sus hijos fuéramos  iguales  y no existiera más hambre,  miseria , infortunio y  desgracia?  

Pues claro que no, de lo  soñado  a la realidad existente hay una gran distancia. Nuestro país atraviesa hace más de cinco décadas la miseria más grande y espantosa de toda su historia, sus hijos fueron abandonados a su suerte por un gobierno totalitario dispuesto  a no ceder ni un ápice  en su doctrina arcaica  y mesiánica.

Muchos han tenido que lanzarse a cualquier cosas por humillante que parezca para sobrevivir o alimentar  a sus críos . 

Hechos  como estos  se  observan  a diario en  vuelta bajo, tal es el caso de Mercedes Alonso Contreras y Nelson Mirabal  de 68 y 47 años de edad respectivamente, los cuales no reciben ayuda por parte del  Estado. 

Mercedes Alonso Contreras, una cubana de a pie que sufre la adversidad del desastre en la Isla nos dijo: 

“Cuando el hambre aprieta,  esta es la forma en que puedo sobrevivir, es el único sustento que he encontrado y lo voy a seguir haciendo”.  

Por Roberto Blanco Gil