Ex árbitro del equipo de béisbol duerme sobre cartones

Por |2018-01-08T11:24:46-06:005 julio, 2017|CID, Defensoría del Pueblo de Cuba, Otros|Sin comentarios
Antonio Castro, hijo de Fidel Castro y médico 
del equipo nacional de béisbol, vive entre el derroche y el lujo
Julio 4 de 2017

Al: Gobierno de la provincia Holguín 
De: Vecinos de Calle 8 # 2 entre 10 y 19, Reparto Harlem, Holguín

Ya hace aproximadamente siete meses que dirigimos una carta muy parecida a esta a Seguridad Social y esta es la fecha en que no se ha recibido respuesta y el caso sigue empeorando.

Rolando Rojas es un señor de la tercera edad, vecino nuestro, que sobrevive con mucha dificultad. En sus tiempos de juventud Rolando fue árbitro del equipo de béisbol, aportando mucho a este gobierno pero al llegar a la edad de jubilación le están pagando una pensión de 118 pesos en moneda nacional, equivalente a 4,25 CUC y aproximadamente a cuatro dólares mensuales.

Un tiempo después falleció su esposa y los hijos de la misma y herederos de la casa lo sacaron de la vivienda, desde entonces Roli, como lo conocemos, duerme encima de unos cartonés y se tapa con nailon en una esquina del patio.  El pequeño ingreso de su pensión (chequera) no le alcanza ni para comprar un jabón pues todos los días tiene que ir a un lugar donde se reúnen varias personas que están en situación similar para comprar la pobrísima comida que les venden.


La mayoría de las veces este hombre come porque los vecinos lo ayudamos y en tiempos de lluvia y frio duerme como puede en los portales.  Es triste ver que un ciudadano que dedicó toda su vida al deporte, entregándose por completo a la formación de muchos jóvenes cubanos, haya sido traicionado y abandonado por la revolución.

En carta anterior le pedimos  a Seguridad Social que lo llevaran a un hogar de ancianos para que al menos tenga un techo, una cama y cuatro paredes en donde terminar sus días, pero han hecho caso omiso de esta situación que denunciamos por segunda vez. Esperamos que ustedes, como gobierno,  se tomen un poco más en serio este problema.

Sin más, en espera de su pronta respuesta.

Por la Defensoría del Pueblo, Osmel Céspedes Artiga y Yadiraidis Duquesne Lacosta, activistas del CID y vecinos del lugar.

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