Las acusaciones del Almirante Craig Faller, jefe del Comando Sur de Estados Unidos, de que el régimen castrista conoce y participa en las operaciones de narcotráfico de la dictadura venezolana pronostican una nueva etapa en la confrontación entre Washington y sus aliados contra el eje castrista cubano/venezolano. Serán una ¿advertencia o una declaración de guerra?
Estas acusaciones se hacen en un contexto político legal muy grave para ambos regímenes. Que la narco dictadura venezolana esté involucrada en el narcotráfico no es una sorpresa, hay evidencia aceptada por la prensa y por gobiernos. Es igualmente conocido que Maduro y su grupo tienen el apoyo y apoyan a grupos terroristas de los más sanguinarios en el mundo. Por eso las acusaciones de narcoterrorismo no sorprendieron mucho, lo que sorprendió fue que el Departamento de Justicia finalmente las hiciera públicas como parte de un proceso legal y ofreciera incluso pagar millones de dólares, entre otros, por la captura de Nicolás Maduro o información que conduzca a esta.
Lo inesperado es que ahora el gobierno de los Estados Unidos, por medio del Almirante Faller, haya reconocido públicamente algo que se sabía pero que ningún gobierno de los Estados Unidos había tenido el valor de decir públicamente: que el régimen castrista lejos de ser ajeno era cómplice en el negocio del narcotráfico.
En una guerra contra el narcotráfico en la cual Washington acaba de poner en acción en la zona una fuerza militar sin precedentes, las acusaciones de Faller equivalen a una advertencia o una declaración de guerra contra el castrismo. Con toda razón el canciller de la dictadura, Bruno Rodríguez Parrilla, declaró inmediatamente que la afirmación era «una calumnia total e infundada, con implicaciones peligrosas». El Almirante Faller apoyó sus afirmaciones en informes de inteligencia al señalar que: «los cubanos han apoyado, sin duda, las actividades ilícitas en las que Maduro está involucrado».
Artículo de La Nueva República
Pero cuando es la invasion ? Por favor que sea ya !