La señora Clara Lago comenta: “tengo una dermatitis crónica en la piel y hace ya dos meses que no puedo comprar la pomada que necesito para que no empeore. He tenido que acudir a la hierba de la sangre que se encuentra en los campos, que no es mala pero no me hace mucho efecto. Necesito de inmediato la triancinolona y el clobetasol que son los únicas medicinas que me controla la dermatitis que tengo en mi piel y que ya se me ha vuelto crónica”.
Se ha convertido en preocupación permanente para la población pinareña la falta de medicamentos en las farmacias de este municipio. Hace más de un mes en la mayoría de estos establecimientos no hay exgofeina, clorodiacepoxido, clobetasol en ungüento, triancinolona y el ibuprofeno, entre otros, que no les pueden faltar a las personas que padecen de migraña, nervios etc.
Esta situación nos ha obligado a acudir nuevamente a remedios caseros o realizar compras de fármacos producidos por laboratorios de Medicina Verde que no son eficientes para el atenuar o curar dichas enfermedades, o acudir a la farmacia donde se vende por moneda nacional a un precio muy elevado. El gobierno castrista es el único responsable de esta situación.
Se ha hecho un recorrido por las farmacias como La Conchita, la Linjó, la Alameda, la Martí, y hasta en las mismas farmacias que se encuentran en las afueras de los Hospitales Abel Santamaría, León Cuervo Rubio y el Hospital Pediátrico Pepe Portilla y solamente hemos encontrado frascos de jarabes, algunas pomadas de ungüentos y cremas.
La falta de medicamentos está provocando un gran descontento en la población. Además de que la distribución de medicinas que se hacía de forma semanal ahora solo se realiza dos veces al mes y en otras localidades solo una vez al mes.
Por Daudy Hermelo Lago, Defensoría del Pueblo
Deja tu comentario