El 5 de abril en una entrevista con el periodista del New York Times Thomas L. Friedman el presidente Barack Obama aceptó que en su nueva política hacia Cuba no hay garantía de éxito, pero que debido a que Cuba era un país pequeño Estados Unidos no corría riesgo probando, y que si no funcionaba, la política se podía ajustar. Estas son sus palabras:
“Somos lo suficientemente poderosos como para ser capaz de probar estas proposiciones sin ponernos en riesgo. Y esa es la cosa… la gente no parece entender”, dijo el Presidente. “Usted toma un país como Cuba. Probar la posibilidad de que en acercamiento conduzca a un mejor resultado para el pueblo cubano no implica muchos riesgos para nosotros. Cuba es un país pequeño. No es una amenaza a nuestros intereses de seguridad, así que no hay razón para no probar la proposición. Y si resulta que no lleva a mejores resultados, podemos ajustar nuestras políticas”.
Por Rolando Pupo Carralero
OK… ¿cuál es el punto?