En Ciego de Ávila la gente dice que “hay que salir a las calles en busca de alimentos o moriremos de hambre, no podemos quedarnos en casa, queremos comida, no multas”. Pero la policía en la calle multa a quien no tiene un nasobuco. Las multas son de 500 pesos, que es dos veces el salario mínimo de 250 pesos. A los cuentapropistas los multan con 1500 pesos si no traen tres nasobucos. Si el cuentapropista los trae no lo multan aunque no lleve ninguno puesto, a los policías no les importa.
La confección de Nasabucos para el pueblo no ha sido prioridad para el régimen en la Isla. La delegación del CID los confecciona y los regala y gente coopera trayendo pedazos de tela. Por el alto precio de la tela y la falta de dinero muchas personas no los tiene.
Por Yanelis Jiménez Téllez, Presidenta Nacional del CID
Artículo de La Nueva República
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