Por meses un enome contenedor con los desechos expuestos

Reclamo entregado y firmado

DEFENSORIA CUBA

A: Dirección Municipal de Salud Pública

A:  Asamblea Municipal Poder Popular Diez de Octubre

Al parecer a nadie ya interesa que un basurero afecte la salud de vecinos y pacientes del Policlínico 14 de junio, en la barriada capitalina de Luyanó. La fetidez y presencia de insectos y roedores hacen de nuestras vidas un suplicio.

Vivimos comprando insecticidas pues las cucarachas aquí son una plaga,  por otro lado, las moscas y los mosquitos son terribles.  Este basurero ya tiene título de propiedad y hasta carné de identidad por los años que lleva en esa esquina sin que nadie haga algo para eliminarlo declaró Juana, vecina del lugar. Aseguró además que el basurero está ahí desde el año 2013. En cambio, los mismos funcionarios de Higiene y Epidemiología del propio policlínico querían ponerme una multa porque se me quedó el tanque de agua destapado”, asegura un vecino que solicitó el anonimato. De hecho varios periodistas se han interesado en el asunto pero nada parece obrar sobre las entidades estatales  responsabilizadas con el molesto asunto.

Además en el área donde se encuentran las consultas de Endocrinología, Psicología y el Departamento de la Trabajadora Social, están varios tanques para el abasto de agua y de ellos se sirven los trabajadores de Servicios Generales para sus labores.

Ni los directivos del Policlínico, ni las autoridades de Salud Pública, Servicios Comunales o el Consejo de la Administración, tanto a nivel municipal como provincial, se han pronunciado o tomado acción alguna con respecto a la eliminación definitiva de este basurero.

En cambio, y como paliativo para que los necesitados boten en ellas su basura, se ha ubicado en el lugar la famosa Caja Pirol, un enorme contenedor destapado de color naranja que en el mejor de los casos, sólo se recoge cuando está repleto de basura. O sea, permanece en el lugar por meses con los desechos expuestos.

Aun los vecinos y pacientes del policlínico esperamos al menos una respuesta de los organos o entidades estatales que deben responsabilizarse con esta grave problemática.

La Habana Febrero 1 de 2016

Por Steve Maikel Pardo Valdés, activista del CID y Defensor del Pueblo en el municipio 10  de Octubre