REYNALDO ARENAS: “CUBA SERÁ LIBRE. YO YA LO SOY”

Reynaldo Arenas fue un cubano excepcional, quienes lo conocimos, quienes compartimos con él quedamos marcados para siempre: humano, genial, patriota, humilde, valiente. Su vida y su obra fueron como un relámpago que iluminó la tragedia del castrismo exponiendo sus más tenebrosas y crueles realidades.

Vino a nuestro mundo con la misión de llenarnos de esperanza, de motivarnos, de hacernos ver que en aquellos momentos de duda, escepticismo y desolación la antorcha de la libertad sería recibida por la nueva generación de cubanos con el mismo amor, valor y espíritu de sacrificio que las anteriores.

Reynado participó en toda actividad de Cuba Independiente y Democrática (CID) a que fue invitado, especialmente en sus congresos, donde con su genio natural estremeció el alma de todos.

Reynaldo merece un monumento en el corazón de los cubanos. El 7 de Diciembre del 1990, con una enfermedad terminal que no le permitiría seguir trabajando, decidió quitarse la vida y escribió una carta de despedida:

“Cuba será libre. Yo ya lo soy…”

Queridos amigos: debido al estado precario de mi salud y a la terrible depresión sentimental que siento al no poder seguir escribiendo y luchando por la libertad de Cuba, pongo fin a mi vida. En los últimos años, aunque me sentía muy enfermo, he podido terminar mi obra literaria, en la cual he trabajado por casi treinta años. Les dejo pues como legado todos mis terrores, pero también la esperanza de que pronto Cuba será libre. Me siento satisfecho con haber podido contribuir aunque modestamente al triunfo de esa libertad. Pongo fin a mi vida voluntariamente porque no puedo seguir trabajando. Ninguna de las personas que me rodean están comprometidas en esta decisión.

Solo hay un responsable: Fidel Castro. Los sufrimientos del exilio, las penas del destierro, la soledad y las enfermedades que haya podido contraer en el destierro seguramente no las hubiera sufrido de haber vivido libre en mi país.

Al pueblo cubano tanto en el exilio como en la Isla le exhorto a que siga luchando por la libertad. Mi mensaje no es un mensaje de derrota, sino de lucha y esperanza.

Cuba será libre. Yo ya lo soy.

Reinaldo Arenas

New York