El 24 de junio el joven cubano Hansel Ernesto Hernández Galiano, de 27 años de edad, fue asesinado de un disparo por la espalda por la policía de la dictadura. Así lo denunció su tía, Lenia Patiño. El crimen ocurrió en La Lima, municipio Guanabacoa, La Habana. La noticia causó indignación en la población y la oposición ha intentado protestar en las calles por este asesinato. El régimen, con un cinismo contradictorio ha tratado de difamar a Hansel haciéndolo ver como un maleante agresivo que atacó a uno de los oficiales con una piedra, por lo que el policía se “defendió”. Sin embargo, la bala que le quitó la vida entró por la espalda de Hansel. La tía que denunció el asesinato asegura que su sobrino estaba desarmado y huía de la policía.
La culpabilidad por el asesinato fue reconocida tácitamente en un comunicado de prensa el 27 de junio publicado en la edición digital del diario oficial Granma: “El Ministerio del Interior lamenta el fallecimiento de un ciudadano durante un enfrentamiento policial en el municipio de Guanabacoa”. El comunicado no obstante describe los sucesos a su manera y a la víctima como un ladrón agresivo. Si eso es así, si el policía lo mató en defensa propia, ¿por qué lamentan el hecho? ¿Como el disparo entró por la espalda si el policía se estaba defendiendo?
“Nosotros, los familiares, pedimos con clemencia que este hecho tan cruel, a manos de nuestra supuesta seguridad nacional, de ninguna manera quede impune”, afirmó la tía de la víctima. También dijo que la policía debería cuidar de los ciudadanos, no hacerles daño, agregando: “porque un policía, un uniforme, no tiene derecho a asesinar de tal manera a nadie. Si sabemos de sobra que les entrenan en defensa personal y deben portar sprays, tonfas, etc. ¿Por qué entonces tuvieron que acudir a su arma de fuego y quitarle un hijo a una madre, a un padre, un sobrino a su tía, un hermano a su hermanita menor”?
El asesinato del joven Hansel Ernesto Hernández Galiano, es otro más que engrosa una lista de actos criminales y abusos de poder cometidos por esbirros al servicio de la dictadura, en el justo momento en que el castrismo, en forma hipócrita, repudia la violencia policial en Estados Unidos tras la muerte de George Floyd por un policía estadounidense. Muy diferente el trato que se le ha dado a Chauvin Dereck el policía que le quito la vida a Floyd, quien ha sido acusado de asesinato.
Cuba Independiente y Democrática (CID) denuncia al régimen castrista por la muerte de Hansel Ernesto Hernández Galiano y se une al pueblo cubano en su repudio por tan cobarde crimen.
Por Jesús Silva Gala*
* dirigente del CID en Pinar del Río
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