Uno de los acontecimiento más revolucionarios del siglo XXI es el reconocimiento de la superioridad de los autos eléctricos sobre los automóviles con motores de combustión interna de gasolina o de petróleo. La supremacía de los autos eléctricos será una realidad que nos sorprenderá, sin embargo en Cuba esto es ciencia ficción. Mientras el mundo avanza vertiginosamente hacia el uso de los carros eléctricos nosotros seguimos en el pasado, como en otras cosas, con la excusa de la mafia castrista de salvar la “revolución”, que es un cuento para mantener al pueblo en el atraso y seguir explotándonos y disfrutándo de los privilegios del poder.
Los motores de gasolina o petróleo tienen 2000 piezas individuales mientras que el motor eléctrico solo tiene 20. Los motores eléctricos son a su vez motores que hacen mover al auto y generadores que producen electricidad recargando las baterías del carro cuando está frenándose. El motor de gasolina o petróleo es un complejo de partes mecánicas que producen movimiento como resultado de las explosiones del combustible en los cilindros, esto genera una enorme cantidad de calor que se desperdicia y que es necesario disipar con aire, agua y aceite. El motor eléctrico comunica su movimiento a la barra de transmisión en forma electromagnética, es decir sin contacto físico, por lo que el calentamiento es mínimo. Solo lleva 10 minutos a dos mecánicos reemplazar un motor eléctrico y poner uno nuevo, el defectuoso se manda a un taller donde es revisado y reparado por maquinaria robótica.
A los autos eléctricos de Tesla el único mantenimiento que les da el dueño es el de ponerle el líquido de los limpiaparabrisas y revisar la presión de las llantas; si el auto tiene fallas lo comunicará automáticamente por medio de Internet. Este tipo de auto tienen sensores de movimiento, radares y cámaras de video que unidos a su inteligencia artificial le permite viajar por las carreteras sin necesidad de que el chofer los maneje, el auto solo necesita que le digan cual es el destino. Si el auto está en un parqueo el dueño no tiene que caminar hacia él, simplemente le avisa al auto que lo recoja donde se encuentra y el Tesla localiza donde está su dueño y llega hasta el lugar. Los autos eléctricos almacenan su energía en baterías, miles de baterías pequeñas que le dan a cada modelo un alcance determinado sin necesidad de que estas se recarguen.
El radio de acción de los autos eléctricos depende de su precio y modelo, por ejemplo el Tesla Roadster puede recorrer 1000 kilómetros sin necesidad de recarga debido a sus baterias de 200 Kilowatts/hora que demorarían recargarse completamente en 44 minutos usando un cargador rápido. Todo a un precio de alrededor de $200.000 dólares. Volkswagen ID.3 Long range que cuesta alrededor de los $40.000 dólares tiene baterías que pueden llevarlo 474 kilómetros antes de necesitar una recarga. El Hyundai Kona tiene carga en sus 64 Kilowatts/hora de baterías para llevarlo 400 kilómetros sin una recarga, todo a un precio de $37.000 dólares. Hasta ahora la desventaja de los autos eléctricos ha sido el alto costo de las baterías que hace que sea más caro comprar un EV (Electric Vehicle) que uno de combustión interna, sin embargo el precio de las baterías de los EV ha ido bajando vertiginosamente y todo parece indicar que la tendencia continuará. En 2010 el costo por Kilowatt hora de una batería era de $1000 dólares, siete años después había bajado a $200 y cuando ese costo llegue a $100 dólares el precio de los autos eléctricos será competitivo con el de los de combustión interna.
Artículo de La Nueva República
Deja tu comentario