Me ofendió, me gritó que los payasos están en el circo, que los gays vestidos de mujer no son bien recibidos

Nayelis Pérez

A: Oficina de Atención a la Población de la Fiscalía General de la República en la provincia de Pinar del Río: Soy una chica trans y mi nombre de nacimiento es Lázaro Vilau Pérez, tengo 32 años de edad con # de carnet 86091001380. Soy más conocida como Nayelis Pérez. Hace varios días fui a la Prisión Provisional de Pinar del Río, a 5 kilómetros y medio de la carretera a Luis Lazo, en la sección de preventiva área #2, en compañía de mi suegra y mi cuñada a visitar a mi pareja, Juan Luis Valdez Silva, que lleva 3 años presos.  Después de una requisa excesiva y cuando nos dirigíamos a entrar al salón de visita, el jefe de esa área, más conocido como el “oficial Osmani”  se dirigió a mí en mala forma preguntándome que a quien yo iba a ver. Cuando le dije que el motivo de mi presencia era para ver a mi pareja comenzó a ofenderme, me gritó que los payasos están en el circo que yo era una falta de respeto por ir con ropa de mujer.  Que no podía dejarme pasar porque no éramos una pareja de matrimonio normal y que en la tarjeta de visita yo no podían poner que somos pareja sino solo amigos y que los amigos no pueden visitar a los reclusos.  Que no fuera más ya que la prisión que es un organismo de respeto y dignidad y que los gays vestidos de mujer no son bien recibidos y mucho menos pueden entrar en donde nadie se responsabiliza de lo que les pueda pasar.

 

Después de tantas ofensas y de prohibirme poder ver a mi pareja, les exijo que me dejen ver al director del Penitenciario o algún superior que me pueda atender y me explique cuál es mi postura ante esta situación.  Nadie me da ninguna respuesta y hacen caso omiso de mi persona, a lo que yo les grito con lágrimas en mis ojos que me pueden negar mis derechos y me pueden prohibir que vea a mi pareja, pero no van a prohibir que le denuncie al mundo lo que vivimos las trans en lugares tan horrendos como estos que nos prohíben visitar a nuestros seres queridos que cumplen una condena. Más tarde, una de las reducadoras vino a donde yo estaba y se disculpó conmigo diciéndome que ellos sólo cumplen órdenes y que si los jefes dicen que no, ellos no podían hacer nada.  En fin pasé el trabajo de ir a ver a mi pareja por gusto y todo porque en las prisiones no todas somos iguales.

 

Hoy a las 3:27 pm mi pareja me llamó por teléfono y me comentó que el jefe estuvo hablando con él y le planteó que yo podía ir, pero vestido normal a lo que mi pareja le preguntó que era normal para él, que si un pantalón y una blusa no eran una ropa normal, pero el oficial le dice que solo puede ser vestido de hombre y punto, que le agradezca que me permite entrar y que tratara que nadie se enterara de lo sucedido.

 

Espero que un día está discriminación ya pare y que podamos vivir en un mundo libre de prejuicios y de tantos estigmas donde las trans somos excluidas.

Nayelis Pérez

Cubano no te calles, defiende tus derechos

Por la Defensoría del Pueblo, Leodán Suarez Quiñones, Coordinadora Nacional de la comunidad LGBT, Cuba Independiente  Democrática (CID).

Artículo de La Nueva República

 

Un comentario

  1. Peter 23 abril, 2019 en 6:48 pm - Responder

    Eso no es política eso una verdad social ,los homoxesuales que se sienten ser de otro sexo son psicopatas sexual,no podemos usar esto como política,el comunismo una peste es verdad pero la homoxesuales es sexo contra natura y violan los derechos humanos del Niño al adoptar un Niño dos homoxesuales del mismo sexo y también engañar un homoxesuales a un hombre haciéndose pasar por medio Jeremías debe ser un delito es un engaño

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