Estatua de Matthew Fontaine Maury removida el 1 de junio por orden del alcalde de Richmond despues de pasar una ley.
El actual conflicto en Estados Unidos desatado por el asesinato de George Floyd en manos de un policía que lo asfixió con su peso y rodillas es motivo de apasionados debates sobre la discriminación y el abuso policial. Uno de los temas se relaciona con la eliminación de estatuas y los nombre de edificios, centros de estudio y bases militares de personajes históricos que estuvieron vinculados con la esclavitud. En unos cuantos casos grupos han derribado estatuas de individuos vinculados con la discriminación en forma real o implícita. Hasta una estatua de Miguel de Cervantes (autor de Don Quijote de la Mancha), uno de los escritores más famosos de la lengua española, quien no tiene nada que ver con la esclavitud, fue víctima del vandalismo. EL CID, organización que rechaza la discriminación en cualquier parte del mundo, pone a disposición de sus dirigentes, activistas, simpatizantes y lectores en Cuba este artículo de Mike García: “Nombren bases para héroes, no para traidores”. El Sr. García es un expiloto de combate de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y actual representante por el Partido Republicano en el Congreso en Washington. El artículo fue publicado por el periódico americano The Wall St. Journal y traducido por La Nueva República.
Agonía de George Floyd
“Nombren bases para héroes, no para traidores”
Matthew Fontaine Maury
Matthew Fontaine Maury no es un nombre conocido, pero un barco de la Marina y un edificio en la Academia Naval de los Estados Unidos en Annapolis, Meryland, llevan su nombre. Eso debería cambiar. Maury (1806-73) tenía 19 años cuando se unió a la Marina. Durante años navegó por el mundo, estudiando el océano y aprendiendo sobre los patrones del viento. Se convirtió en uno de los fundadores de la oceanografía. Al inicio de la Guerra Civil (una parte de Estados Unidos luchado por la libertad de los negros –la Unión- y otra parte en contra –la Confederación), Maury regresó a su hogar en Virginia. Renunció a su puesto en la Marina y eligió la traición, la secesión y la esclavitud por encima de su juramento a la Constitución. Mientras luchaba por la Confederación, Maury diseñó minas navales que hundieron barcos de la Unión. Nada en el ejército estadounidense debería honrar su nombre.
Yo soy un orgulloso graduado de la Academia Naval de Estados Unidos. Como piloto de un F-18, volé más de 30 misiones de combate en la Operación Libertad Iraquí. Sé por experiencia cómo el ejército puede transformar vidas y enseñar liderazgo.
Por eso es tiempo de que los militares cambien el nombre de bases, edificios, barcos y cualquier otra cosa que honre a los que lucharon a favor de la Confederación. Su apoyo a la esclavitud fue erróneo y calamitoso para el país. Unos 618.000 americanos murieron en la guerra civil, casi el mismo número que en las otras guerras de la nación combinadas.
Algunos sostienen que quitarles los honores a los rebeldes está borrando la historia. Respetuosamente discrepo. Creo que los norteamericanos deben estudiar historia y aprender de ella; se anima a los miembros del servicio militar a leer la historia en su propio tiempo, y veteranos como yo mantienen el hábito. Pero estudiar historia no requiere honrar a figuras confederadas.
De la misma manera, se puede celebrar a líderes imponentes del pasado por sus contribuciones a Estados Unidos -como George Washington y Abraham Lincoln- mientras se traza una línea firme en contra de honrar a quienes lucharon por destruir a Estados Unidos.
El trabajo de reconocer el pasado confederado es demasiado importante para dejárselo a la turba. El vandalismo es una afrenta al estado de derecho. El cambio de nombre de los edificios y la eliminación de las estatuas deben hacerse de forma ordenada por canales legítimos. La sociedad estadounidense se basa en leyes. La adhesión a la ley es lo único que separa a cualquier sociedad de la barbarie.
Es por eso que los llamados a desfinanciar o abolir los departamentos de policía son indignantes. Mi padrastro, miembro del Departamento de Policía de Los Ángeles, puso su vida en la línea por cada familia de nuestra comunidad. Los sacrificios de los agentes del orden y sus familias con demasiada frecuencia pasan desapercibidos.
Una abrumadora mayoría de los norteamericanos están de acuerdo en que la aplicación de la ley necesita una reforma y que los oficiales abusivos deben rendir cuentas. Pero recortar drásticamente el presupuesto de la policía desafía la lógica e invita al desastre.
Los verdaderos héroes de Estados Unidos son aquellos que luchan por preservar el orden, nos libran del mal y aseguran que todos los norteamericanos sean tratados de la misma manera. Los secesionistas pro-esclavitud que dividieron la nación en dos y mataron a tantos de sus compatriotas no merecen esos honores.
Pongámonos de acuerdo para honrar nuevos héroes estadounidenses. Esta nación no tiene escasez de ciudadanos merecedores de ser honrados.
Por Mike García, 2 de julio de 2020. El Sr. García, miembro del Partido Republicano, representa el 25º distrito de California en el Congreso de los Estados Unidos.
Deja tu comentario