En Cuba aumenta el número de indigentes que duermen en las calles y en la mayoría de los casos se trata de ciudadanos afrocubanos. La situación es alarmante y el gobierno lejos de asistirlos se escuda en la pobre justificación de que los indigentes son responsabilidad de sus familias, aun en los casos que no tengan familia o no puedan contar con ella, situación bastante común entre los indigentes. El Partido Cuba Independiente y Democrática (CID) denuncian esta injusticia.
Al relatar brevemente su historia, este ciudadano que solicitó el anonimato, dijo que en su infancia ayudó a su padre quien se desempeñaba como mecánico y que en su adolescencia fue reclutado para el servicio militar obligatorio, situación que le causó padecimientos nerviosos, que desde entonces lo afectan.
Organizaciones de derechos humanos, incluido el Comité Ciudadano por la Integración Racial, han llevado el tema a agendas internacionales, mediante informes –por ejemplo, “Negación, Exclusión y Represión, situación de los derechos humanos de los afrocubanos”-, que recogen el tema. Sin embargo el problema empeora y el gobierno no responde.
Por la Defensoría del Pueblo, Esber Rafael Ramírez Argota, delegado del CID en Antilla, y Luis Machado Reinosa
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