El salario tiene que garantizar que los ciudadanos vivan por encima del nivel de la pobreza: $2 dólares al día

La Plusvalía según Karl Marx…Es el valor que el trabajo no remunerado crea por encima del valor de su fuerza de trabajo y se apropia gratuitamente el capitalista. Es la forma específica que adquiere el plusproducto bajo modo de producción capitalista y forma la base de la acumulación capitalista.  En otras palabras, Plusvalía es la diferencia del trabajo realizado por el trabajador que no se le paga y se apropia el capitalista…o el comunista.  Desde los grandes clásicos como Tomas de Aquino, Adam Smith, David Ricardo, hasta Keynes, las teorías Georgianas y otras del pasado siglo, que tocaron de una forma u otra la importancia del salario y la productividad, no sabemos en Cuba que teoría se aplica.  Según las normas y acuerdos internacionales sobre la función social del salario, este con su remuneración tiene que garantizar ciertos requisitos para que los ciudadanos vivan por encima del nivel de la pobreza: $ 2 dólares al día), estos son:

Alimentación adecuada.

Habitación,

Vestuario,

Transporte,

Previsión (presupuesto capacitación-superación),

Cultura y recreación honestas.

 

En pocas palabras, después de pagar los gastos fijos de habitación,(agua, electricidad, gas, teléfono, alquiler), literalmente nos mal alimentamos, nos mal vestimos, no nos recreamos, no nos superamos(con ausencia de literatura, información y redes digitales internacionales), además de otros bienestares espirituales y naturales que se alcanzan con un salario decoroso, como la realización, planificación y reproducción familiar, tan necesaria e importante en un país por su tributo al aumento de las fuerzas productivas y el desarrollo posterior de la sociedad.

 

También, cabe señalar el Convenio sobre la fijación de salarios mínimos (número 131), ratificado por Cuba en 1972.

 

En este Convenio se establecen las condiciones para fijar el salario mínimo del país. En concreto, en su “artículo 3: (a) las necesidades de los trabajadores y de sus familias habida cuenta del nivel general de salarios en el país, del costo de vida, de las prestaciones de seguridad social y del nivel de vida relativo de otros grupos sociales; (b) los factores económicos, incluidos los requerimientos del desarrollo económico, los niveles de productividad y la conveniencia de alcanzar y mantener un alto nivel de empleo”.

 

Ha transcurrido varios años desde el cacareado proceso de Disponibilidad y Productividad de los trabajadores cubanos, los cuales continúan sufriendo el peso de la economía y su pobre retribución monetaria. Los salarios mínimos cubanos están por debajo de la mayoría de los países latinoamericanos, nadie en el gobierno aboga por un cambio, los más de 100 lineamientos partidistas, 50 objetivos de la conferencia del PCC, la nueva Constitución, Congresos de CTC, Congresos de la UNEAC, Día del Jurista y en ninguno se debatieron los temas relacionados con la economía que más afectan a los cubanos por más de 50 años; la vivienda, la alimentación básica, libertad empresarial, seguridad económica y salarios decorosos.

 

De nada sirve este aumento de salario, creo que es una de las válvulas de escape de presión a la olla del descontento ciudadano.  Además los precios y sus componentes deben de dejar de ser abusivos e ilegales, por consecuencia inconstitucionales. En la conformación de los fichas de precios, es relevante las fichas de costo de los productos y los márgenes comerciales aprobados por el Ministerio de Comercio Interior, que yo conozca ninguno debe ser superior a 6 %. En esas fichas de costo intervienen,

valor de la factura,

flete,

seguros,

aranceles,

servicio aduanales,

manipulación terminal contenedores,

financiamiento,

 

Y otros detalles de las empresas importadoras. Por lo tanto esos súper y abusivos precios de los productos de primera necesidad, es una forma de violar diariamente los derechos humanos en Cuba. El GAESA, que es en la práctica quien se ha adueñado de la comercialización en nuestro país, no cree ni en canasta básica ni en canastilla de las pocas y valientes madres que desean parir, ni en discapacitados, ni jubilados, en nadie. Por supuesto a los militares no les faltan sus productos sin esos híper precios, desde electrodomésticos hasta alimentos y sus casas de recreación estimulando a hombres no productivos, no necesarios(hace años que no hay guerra ni la habrá, y son tan cobardes que en un supuesto, tratan de enviar a infelices e inexpertos jóvenes del Servicio Militar).

 

No hay respaldo productivo para aumentar salarios, eso genera más inflación. No existe un balance de carga-capacidad adecuado y objetivo para definir todos los puestos de trabajo necesarios, (quieren un ejemplo, fíjense cuantos trabajadores laboran en oficinas de Etecsa o en los bancos; dos ventanillas atendiendo y 8 o 10 sentados dentro con su aire acondicionado y haciendo como que trabajan, mientras las filas de usuarios se mantienen afuera interminable).

 

Considero este aumento de salario como una estrategia política para aumentar la represión, el control, la imagen exterior…un colorete parecido al de la Habana Vieja.

 

Aunque expertos han tocado el tema con más aciertos, existen muchas medidas que se pudieran implantar para mejorar nuestra economía;

 

  1. Que se entreguen las tierras en propiedad a los campesinos y un Banco Especializado Agrícola que conceda créditos con bajos intereses y buenas ofertas de pago.
  2. Permitir la compra de recursos en el exterior y recibir donaciones a campesinos y cooperativas con bajos impuestos aduanales.
  3. Que se reinstaure el Mercado Libre Campesino, con bajos impuestos o pagos en especies a los campesinos y cooperativas para destinos sociales, así como a productos no agrícolas de las PEYMES nacionales.
  4. Permitir la inversión de capitales a todos los cubanos sin discriminación en cualquier empresa estatal o privada.
  5. Reconocer la personalidad jurídica de los emprendedores privados para poder importar y exportar, pedir créditos externos y externos, y poder crear sucursales y franquicias, para incrementar su economía y la del país.

 

Lic. Edilio Hernández H.

Artículo de La Nueva República

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