La mar trae
lo que se lleva,
redes de pescadores,
restos de naufragios,
la última mirada
que se fijó en el cielo
como un presagio.
La mar trae
lo que se lleva,
mochilas vacías,
pañales, trapos,
zapatos con agujeros,
botellas plásticas,
pedazos de flotadores.
A la deriva llegan
cadáveres con sus sueños
a alguna playa impensada
de alguna costa desierta.
La mar trae
lo que se lleva,
la nostalgia
por aquel que se fue
y aún no podemos dejar ir.
Lágrimas de miles de madres,
lágrimas de miles de huérfanos.
La mar trae
lo que se lleva,
la memoria persistente
del amigo verdadero,
sentimientos divididos,
sentimientos encontrados
en el delta que se forma
entre el recuerdo y el duelo
que grita su certeza
y su “¿por qué?”
¿Por qué así
su tierra dejó
el balsero, el exiliado,
el desplazado, el migrante?
Siglo XXI, pregúntate:
Por qué así,
todos los días se echan a la mar
para nunca más volver.
Este poema lo dedico a la memoria de los miles de ahogados anónimos que salieron de su país en busca de libertad o para no morirse de hambre por Isabel Parera.
Isabel Parera es autora de Cinco Años y un Día. Nació en Santiago de Cuba en 1952, desde donde salió como refugiada política en 1970. Vivió en Nueva York 16 años y desde 1986, radica su hogar en Puerto Rico. Tiene un doctorado en Filosofía y Letras del Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe. Actualmente es profesora en la Universidad de Puerto Rico. Fuente AUTORES
Reproducido por La Nueva República
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